Ciertos pescadores sacaron del fondo una botella.
Había en la botella un papel, y en el papel estas palabras:
-¡Socorro!, estoy aquí. El océano me arrojó a una isla desierta. Estoy en la orilla y espero ayuda. ¡Dense prisa. Estoy aquí!
-No tiene fecha. Seguramente ya es demasiado tarde. La botella pudo haber flotado mucho tiempo, dijo el pescador primero.
-Y el lugar no está indicado. Ni siquiera se sabe en qué océano, dijo el pescador segundo.
-Ni demasiado tarde ni demasiado lejos. La isla Aquí está en todos lados, dijo el pescador tercero.
El ambiente se volvió incómodo, cayó el silencio. Las verdades generales tienen ese problema.
Wislawa Szymborska (Parábola)
Ni demasiado tarde, ni demasiado lejos. Tampoco demasiado pronto. Hoy es el día.
Me recuerda una cita de la que ahora no recuerdo la fuente: El mejor momento para plantar un árbol era hace veinte años, el segundo mejor momento es hoy. Y además aquí.
Sin más dilaciones.